Saltar al contenido
Guitarras del Carnaval de Cadiz

La Caleta, enclave del Carnaval de Cádiz




Si hubiera que hacer un análisis de todos los enclaves de Cádiz que han recibido más coplas por parte de los poetas del carnaval, seguramente la playa de La Caleta encabezaría todas las listas posibles.

 

Anclada en el corazón del barrio de La Viña, en el casco antiguo de la ciudad, fue un antiguo puerto natural donde fondearon barcos de fenicios, cartagineses y romanos, así que ya podemos atisbar la importancia geográfica y cultural de aquella localización muchísimo antes de que llamase la atención por su belleza singular al forastero.
La Caleta se abriga entre dos castillos que resguardan de temporales y fuertes oleajes, convirtiéndola en una playa tranquila, ideal para esos días en los que el viento de Levante se encuentra furioso en verano. Se dice, que en La Caleta estuvo el otro anfiteatro romano, tan inmenso que ocuparía toda la playa en su totalidad, y que desde allí se recrearían incluso batallas navales.
Se entiende así, la importancia que ya tuvo esta playa, antes puerto, en el comercio, cultura, gestión y forma de vida de sus habitantes desde épocas inmemoriables, como hoy día, La Caleta continúa siendo el pulmón, el eje y el estandarte del barrio viñero en su día a día. Tan bello rincón ha sido escenario de películas, tales como Alatriste, Manolete, el Amor brujo, o 007 muere otro día.
Pero, aparte de toda su inmensa historia, una de las cosas que más llama la atención de esta singular playa son sus piedras, en su toponomía, restos visibles sobre los tesos de cuando la Caleta fue utilizada como cantera, y es que, la piedra ostionera que recubre toda su fisonomía ha sido utilizada en la construcción de numerosas edificaciones, como la Iglesia de San Lorenzo o la del Hospital de Mujeres.



La importancia de sus piedras no queda ahí, ¿sabían que cada piedra de La Caleta tiene un nombre? Desde tiempos prétéritos estas marcas o piedras han recibido nombres muy curiosos por parte de la gente del lugar, aunque la mayoría de ellas se encuentran dentro del término geográfico de la playa, hay algunas que están fuera de la misma, como la Laja de la Garita, situada frente al Ventorrillo del Chato (autovía con San Fernando). También destacar, que no todo son piedras, también podemos reconocer campos o puntas.

Distribución de las piedras

El carnaval en las piedras

Antonio Martín, en 1997, trajo al Gran Teatro Falla la comparsa ‘Los Buscavidas’, alzándose con el primer premio de la modalidad, además de ser aquel año pregonero de los Carnavales de Cádiz, un año redondo. El coplero de la calle San Vicente aprovechó ese año para cantar una copla muy original, dedicándole un pasodoble a todas las piedras de La Caleta, como se refleja en este pasodoble.
Letra del pasodoble:
Quiero engarzar en mis labios
una letanía..
Punta del Sur, El Diablo,
El Camión, La Raurilla,
La Isleta, Punta del Nao,
y la Casetilla..
La Piera Cuadrá,
La Palangana, Boca Grande,
El Piñón, Puente la Arena,
Puente Canal, Poza Cerrá,
ay, Las Tres Piñuelas..
Las Tres Piñuelas..Las Tres Piñuelas..
La Piera Rota,
Los Jureles, La Isletilla,
Medio Lance, La Puntilla,
El cerrá, Las Albujeras..
Acuarelo..Acuarelo,
Ola Bandera
y El Camello..y El Camello..
Punta El Diablo, Espolón,
Puntilla del Arcón,
Los Erizos y La Piera Reonda..
Puntilla Brava, El Tornillo,
La Albaja y La Olla..
Eres una joyería
con tantas piedras preciosas..
y mientras oigo las olas batir,
esos nombres, ay, en mi boca,
bajo tu luna vengo a repetir..
ay, Caleta mía..
que eres letanía de mis coplas..
de mis coplas, ay, de mis coplas

Enrique Villegas tampoco se olvida de las piedras caleteras




Una de las comparsas más reconocidas de Enrique Villegas, ‘Quince Piedras’, se alzó en 1984 con el tercer premio en la modalidad, si bien hubo una controversia aquel año, debido a que el Diario de Cádiz publicó los premios antes de tiempo, se decía que la comparsa de Villegas era un primero, pero para evitar dar a conocer el chivatazo acabó dándosele un tercero.
Fuera de polémicas, ‘Quince piedras’ interpretó un pasodoble que hoy día sigue sonando en la memoria de todos los carnavaleros y en las antologías que se realizan.
Letra del pasodoble
Que las piedras son duras
será del modo que se las mire
hay cosas que en la vida
hacen a la gente cavilar
pues las de la Caleta se pueden demostrar
que son como las madres
de muchos peces que hay en la mar.
A mi se pegan lapas y mejillones
a mi vienen a miles los pulgaillos
me rondan borriquetes y chapetones
y nacen amparaos los cangrejillos
y crecen y maduran los ostiones, los ostiones.
Las mojarritas llevan mis apellidos
turururú, tururu…
las morenas se duermen en mi regazo
turururú, tururu…
el erizo me pincha a su alveredrío
y los pulpos me colman con sus abrazos.

Martín, esta vez desde la piera reonda

  

 

En 2010, nuevamente Antonio Martín trae una comparsa con alegoría a las piedras gaditanas, ‘Los caballeros de la piera reonda’ son unos defensores aférrimos de la ciudad, donde desde su privilegiada situación geográfica pueden luchar contra cualquier enemigo o invasor que pretenda doblegar a la Tacita de Plata.
 
Una estampa mágica
 
A día de hoy, la playa de La Caleta y sus piedras siguen siendo el nexo de unión perfecto entre la poesía y el Carnaval de Cádiz, una historia cantada a un rincón que nadie puede perderse si visita la ciudad. Cuando Cádiz comienza a apagarse, el cielo comienza a volverse de un tono anaranjado que unidos al vaivén de las barquillas amarradas en la orilla se transforman en una estampa única e irrepetible.




 
Un lugar en el que sin lugar a dudas merecería la pena nacer y morir, como lo hace el sol cada día de sus días al abrazo de Catalina y Sebastián, al abrazo de un pueblo que seguirá dedicándole coplas por febrero, año sí, año también.
Fuente: https://www.codigocarnaval.com (2016)